miércoles, 24 de julio de 2013

Arlette Geneve

Vindicatio
VindicatioSolo es necesario un instante aciago para cambiarnos el destino.
27 a.C. Las intrigas políticas y las traiciones están a la orden del día en el Imperio romano. Las ansias de poder de muchos de sus senadores les llevan a cometer actos reprobables. Nadie había preparado a Aradia para lo que le aconteció a su familia. Una aciaga noche su vida tranquila y pacífica quedó rota y su protección pasó a manos del hombre por el que ella siempre había aguardado en silencio.
El general Máximo Magno, uno de los centuriones más aguerridos del Imperio, un hombre destinado al norte de sus confines, regresó a Roma para darse cuenta de que su madre, en su ausencia, había tomado algunas decisiones por él. Y, fruto de ellas, se vio encadenado a una chiquilla a la que siempre había visto como una niña. Lejos de Roma ambos tendrán que empezar a conocerse y a aprender a convivir con el otro...
 

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